
Azazel: el demonio del desierto en el ritual del chivo expiatorio
En el rito del Día de la Expiación descrito en Levítico 16, se menciona a una enigmática entidad llamada Azazel, a la que algunos vincularon con un demonio del desierto al que se enviaba un chivo cargado de los pecados de Israel.
Azazel en Levítico 16
En el ritual del Yom Kippur, se escogía a dos chivos, uno sacrificado a Yahvé y otro enviado «para Azazel» cargando los pecados de Israel, que era soltado en el desierto. No queda claro si Azazel es un lugar, un ser sobrenatural o un concepto.
Identificación con un demonio
Algunas tradiciones judías consideran que Azazel no es un lugar sino el nombre de un demonio o entidad maligna a la que se devolvía simbólicamente el mal expulsado de Israel.
Sería una suerte de espíritu del desierto o dios cabrío a modo de ser sobrenatural que habitaba en la naturaleza salvaje. Esta interpretación se basa en la raíz hebrea “azal” (alejarse).
Otras interpretaciones
Otros lo consideran el nombre de un acantilado donde se lanzaba al chivo. También se lo asocia al chivo en sí o al pecado abstracto. Sea lo que fuere, Azazel representa la expulsión ritual del mal.
Una enigmática entidad que inevitablemente adquirió tintes demoníacos en la imaginación religiosa posterior.