
Oseas: El ocaso final de Israel
Oseas fue el último rey del Reino de Israel, gobernando entre 732 y 722 a.C. Bajo su reinado, el reino del norte fue definitivamente destruido y sus habitantes deportados por el imperio asirio.
Un reino moribundo
Para cuando Oseas llegó al poder, Israel ya estaba en una situación crítica:
- Los reyes anteriores habían permitido la idolatría descontrolada.
- El imperio asirio, bajo Tiglat-Pileser III, había reducido a Israel a un estado vasallo.
- Había creciente agitación política y asesinatos entre los reyes.
Caída ante los asirios
Oseas intentó liberarse del yugo asirio aliándose con Egipto. Pero el rey asirio Salmanasar V invadió Israel en 725 a.C.
Tras un cruento sitio de 3 años, su sucesor Sargón II conquistó Samaria en 722 a.C. Oseas fue encarcelado y los israelitas fueron deportados. Así terminó el Reino de Israel.
Legado
Oseas, como último rey de Israel, dejó un amargo legado:
- Presenció la destrucción definitiva del reino del norte por los asirios.
- Pagó las consecuencias de dos siglos de corrupción y abandono del camino de Dios por parte de sus antecesores.
- Demostró que la idolatría y el pecado conllevan inevitablemente al juicio divino.
Oseas pasó a la historia como el último monarca de la desafortunada nación del norte, corrompida por la impiedad hasta su extinción.